El color juega un papel fundamental en el diseño un material, pues este elemento busca comunicar, enseñar o crear puntos de atención.
Por ende, la teoría del color comprende un grupo de reglas básicas en la mezcla de colores para conseguir el efecto deseado, por medio del círculo cromático.
El círculo cromático, según Ambrose (2005), es una herramienta donde se encuentran los colores organizados como complementarios, análogos o complementarios mutuos (tríada de colores equidistantes y el complementario del central).
Por lo tanto, algunas mezclas armónicas que se pueden lograr aplicando esta teoría son:
- Mezcla de colores complementarios, en el círculo se encuentra uno frente al otro.
- Complementarios divididos, escogencia de un color y aquellos adyacentes a su complementario.
- Mezcla de análogos, basados en un color principal y los dos situados a su derecha e izquierda inmediata, entre otras.
También existen dos modelos de color: el modelo sustractivo, que está formado por tres colores primarios que son el cyan, magenta y amarillo y la mezcla de los tres forma el negro; el modelo aditivo, que está basado en tres colores primarios, el rojo, verde y azul los cuales son los que se usan en las pantallas, por lo que la mezcla de los tres colores forma el blanco.
Dos de los sistemas cromáticos más difundidos y usados son el RGB (siglas en inglés de rojo, verde y azul) y el CMYK (siglas en inglés de cyan, magenta, amarillo y negro). El RGB suele usarse para la edición digital y el diseño inicial, mientras que el CMYK se utiliza para la edición impresa.